En la ciudad de Bariloche (Pcia. de Rio Negro, Argentina) se encuentra el mejor lugar para disfrutar de una exquisita cerveza, donde se produjo la primera cerveza artesanal elaborada de manera comercial en Bariloche. La historia se inicia en el año 1990, cuando a los ingenieros químicos Julio y Nicolás Silim les ofrecieron un retiro "voluntario" en la empresa de tecnología Invap. Esta metodología de despidos encubiertos era muy habitual en la Argentina de la década del ´90. Por aquellos años muchas empresas reducían personal sin ningún miramiento amparados por la política nacional de flexibilización laboral del gobierno de ex presidente Carlos Menem.
Así en estos momentos de crisis (palabra que en la simbología del idioma chino está compuesta por los términos que significan "peligro" y "oportunidad") fue como estos dos hombres se replantearon qué hacer con el dinero de sus indemnizaciones. Probablemente podrían haber elegido opciones menos arriesgadas, pero en cambio decidieron dar vuelta la página encarando desde cero un proyecto propio en el que depositaban todas sus expectativas y todos sus ahorros. La suerte no les dio la espalda y así fundaron la exitosísima Cervecería artesanal Blest, ubicada a la altura del Km. 11.600 de la Av. Bustillo, que bordea el hermoso lago Nahuel Huapi de Norte a Sur de la ciudad de Bariloche.
El lugar es sumamente acogedor. Toda su estructura está terminada con madera a la vista. El salón principal cuanta con enormes ventanales orientados hacia el jardín de entrada, donde se encuentra una vieja camioneta que transportaba barriles de cerveza en los inicios del proyecto. Por otra parte, Blest cuenta con la original decoración que sus propios visitantes van construyendo a lo largo del tiempo: cada comensal recibe junto con su preciado chopp de cerveza un posavasos de cartón decorado con diversos diseños, que al terminar de comer utiliza para dejar escrito un mensaje que luego se prende con una chinche sobre la estructura de madera del local. Así, mientras se disfruta de esta excelente cerveza tirada, uno se puede divertir leyendo las originales frases que se fueron inmortalizando a lo largo de todo el salón.
Así en estos momentos de crisis (palabra que en la simbología del idioma chino está compuesta por los términos que significan "peligro" y "oportunidad") fue como estos dos hombres se replantearon qué hacer con el dinero de sus indemnizaciones. Probablemente podrían haber elegido opciones menos arriesgadas, pero en cambio decidieron dar vuelta la página encarando desde cero un proyecto propio en el que depositaban todas sus expectativas y todos sus ahorros. La suerte no les dio la espalda y así fundaron la exitosísima Cervecería artesanal Blest, ubicada a la altura del Km. 11.600 de la Av. Bustillo, que bordea el hermoso lago Nahuel Huapi de Norte a Sur de la ciudad de Bariloche.
El lugar es sumamente acogedor. Toda su estructura está terminada con madera a la vista. El salón principal cuanta con enormes ventanales orientados hacia el jardín de entrada, donde se encuentra una vieja camioneta que transportaba barriles de cerveza en los inicios del proyecto. Por otra parte, Blest cuenta con la original decoración que sus propios visitantes van construyendo a lo largo del tiempo: cada comensal recibe junto con su preciado chopp de cerveza un posavasos de cartón decorado con diversos diseños, que al terminar de comer utiliza para dejar escrito un mensaje que luego se prende con una chinche sobre la estructura de madera del local. Así, mientras se disfruta de esta excelente cerveza tirada, uno se puede divertir leyendo las originales frases que se fueron inmortalizando a lo largo de todo el salón.
Con motivo de su décimo segundo aniversario Blest organizó este año el tercer concurso de diseño de posavasos en el cual participaron muchos de sus fanáticos.
Además de sus cinco variedades de cervezas artesanales (Pilsen, Bock, Stout, Scotcht Ale y Frambuesa) y de su sidra artesanal (llamada"Pecado original") se puede degustar de maravillosas tablas de picadas ahumadas. Resulta verdaderamente imperdible la "Picada combinada" (ver foto) que cuenta con trucha, ciervo, jabalí y quesos ahumados, mantecas saborizadas, leberwurst, nachos con queso derretido, brusquetas de campo, mix de ensaladitas alemanas, albondiguitas en salsa, salchichas vienesas, chucrut y muchas otras delicias.
Si el Cerro Campanario ofrece una de las diez mejores vistas del mundo, según National Geographic, Blest, es sin dudas uno de los lugares gastronómicos más placenteros de Bariloche.
Además de sus cinco variedades de cervezas artesanales (Pilsen, Bock, Stout, Scotcht Ale y Frambuesa) y de su sidra artesanal (llamada"Pecado original") se puede degustar de maravillosas tablas de picadas ahumadas. Resulta verdaderamente imperdible la "Picada combinada" (ver foto) que cuenta con trucha, ciervo, jabalí y quesos ahumados, mantecas saborizadas, leberwurst, nachos con queso derretido, brusquetas de campo, mix de ensaladitas alemanas, albondiguitas en salsa, salchichas vienesas, chucrut y muchas otras delicias.
Si el Cerro Campanario ofrece una de las diez mejores vistas del mundo, según National Geographic, Blest, es sin dudas uno de los lugares gastronómicos más placenteros de Bariloche.
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